martes, 7 de enero de 2014

Y A LA FIEBRE DEL ORO SE LA LLEVÓ EL VIENTO

No sé si es debido al amplio pasado hispánico de la región o a que tal vez la fiebre del oro sigue haciendo estragos en el estado de California pero en el cuartel general de Los Ángeles Lakers a lo largo del día de hoy (martes 7 de enero de 2014) deberían presentarse más dimisiones que en las oficinas de Hacienda españolas en las últimas fechas. Pero todo apunta a que no dimitirá nadie y que seguramente se paseen plácidamente por las apacibles playas de la costa pacífica estadounidense.

Los Ángeles Lakers han hecho el mayor ridículo de una franquicia (a nivel de gestión administrativa) en la NBA desde los tiempos en los cuales Isiah Thomas fue general manager los New York Knicks. Nadie entiende porque han dejado pasar un chollazo así para ahorrarse el impuesto de lujo en una campaña en la cual viendo como está de fuerte el Oeste, y con Kobe Bryant y Steve Nash más cerca del palco de Staples Center que de Jack Nicholson y la cancha, es virtualmente imposible que se clasifiquen para play-offs.

La avaricia cegó a los californianos al exigir lo inexigible: algo a cambio de un jugador que acaba contrato en Junio y ahorrarse una millonada en tasas de impuesto de lujo. Estaban tan convencidos que en Cleveland tragarían con el farol que han acabado haciendo un ridículo espantoso. Y eso que ya desde Ohio avisaron que no era unos principiantes del poker y enviaron un claro mensaje a California: deberían conformarse con ver la apuesta y no farolear intentando subirla. La vía de Chicago con Luol Deng, aunque a priori parecía algo más complicada, nunca se descartó e incluso, para mostrar más cartas sobre el tapete, se llegó a especular con enviar el contrato de Bynum a las Montañas Rocosas a cambio de Richard Jefferson dejando claro que en Cleveland no se andaban con tonterías; la baraja era suya.



No obstante hasta última hora se dejó abierto el camino a California dando por sentado que era la operación más “lógica” a todas luces pero desde los Lakers seguían erre que erre, querían algo más, se sentían demasiado poderosos y veían absolutamente improbable que el viento de Illionois pudiera llevarse por delante a sus lingotes dorados. Y finalmente, como si fuera Mary Poppins, el contrato de Bynum (junto a tres rondas del Draft) se dejó guiar por el viento y acabó en Chicago, el segundo plato del menú. Y ya pueden ir en Los Ángeles amontonando lingotes para pagar la tasa de impuesto de lujo en verano.

En Chicago tenían claro que, a pesar de ser el mismo equipo que en 2013 puso a Miami Heat contra las cuerdas en las semifinales del Este, este año no iba a ser lo mismo a pesar del escaso nivel del Este más allá de Indiana y Miami: la depresión post-lesión de Rose, Deng pensando en su contrato 2014-15 en lugar de en la temporada 2013-14, Carlos Boozer rindiendo por debajo de lo esperado... no soplaban buenos vientos por las calles de Chicago. Cleveland refuerza (temporalmente) hasta junio su principal punto débil, el puesto de alero, tras el fiasco de la elección como número 1 del Draft de Anthony Bennet, vuelven a tener esperanzas de entrar a play-offs e incluso ser semifinalistas de Conferencia y el sueño secreto en Cleveland... ¿LeBron James será el nuevo alero en 2014-15?

El contrato de Andrew Bynum finalmente se queda al inicio del recorrido de la legendaria Ruta 66, en Chicago, y no viaja al final de la misma, Los Angeles, como hubiera sido de prever. Eso sí el jugador no se mueve de su casa ya que antes de las 17:00h (horario de New York) de hoy martes día 7 de enero su contrato será rescindido y Chicago se ahorrará así pagar impuesto de lujo en verano. Y ahora a esperar a ver cuanto tardan los Nets en presentar a Bynum como nuevo jugador... por Brooklyn también aspiran a ganar el premio a peores gerentes del año e incluso a que vaya a entregárselo el propio Thomas en la próxima ceremonia del Draft en Junio...

JOSÉ BAUTISTA (Perol N Rock)

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