¿Qué demonios pasa?, esto es lo que nos estamos preguntando todos. ¿Dónde está el bicampeón de Europa?. Que malos son, no meten una, son unos blandos. Este tío no tiene ni idea. Este es mi equipo, quizá podría ser del Madrid o del Barça, pero soy de la selección española, desde hace muchos años. Viví el angolazo, el chinazo, el boom y el pinchazo...todo lo que pueda ser reseñable, en nuestros últimos 30 años de basket.
Desde esa posición de años de seguir este equipo veo dos detalles, falta de liderazgo y falta de humildad. Y lo veo en muchos pequeños detalles.
Ya en este blog se ha hablado de las dudas que ofrecen determinadas decisiones del seleccionador. Voy a intentar ser equilibrado y no echarle todo el muerto encima. Pues ni lo creo ni sería justo. Empecemos por la convocatoria, primero habría que saber qué objetivos nos planteábamos con ella. No era una transición, sino que desde el primer momento se ha ido a ganar el eurobasket, y con esto estoy de acuerdo. No hay más? Pueden determinados jóvenes sustituir a los que no han venido o a los que lo han hecho, en mi opinión si. Eso hace de esta convocatoria un mal grupo, rotundamente no. Germán Gabriel es un jugador que puede sumar, con mucha calidad, pero eso si, un físico muuuuuuy limitado para estas batallas de alto nivel. Aguilar es otro caso distinto, ¿a qué se debe su desaparición, pues no tengo ni idea, puede ser falta de acierto, no lo se, pero da la sensación de que ha perdido algo que parecía que tenía ganado. En cuanto a Mumbrú, me parece un excelente complemento, y estoy de acuerdo con la idea de que a veces juegue de 4, pero no creo que deba en esa posición más que ser un recurso, no una mas de las rotaciones. No creo que ninguno de los jóvenes 3 puedan tener esa capacidad de adaptarse a dos posiciones sin haberlo trabajado antes. Ejemplo Víctor Claver.
Aquí empezamos con temas más peliagudos, no es de recibo que sacrifiquemos un montón de minutos en Víctor para qué gane confianza y cuando hace los dos mejores partidos de su vida con la selección, cuando esa inversión está dando sus frutos, salga Mumbrú casi lo mismo que el y encima sin hacerlo mejor que el. Aquí es donde veo falta de liderazgo por parte de Orenga. Víctor es mejor en el nivel que demostró a todos el otro día de rato largo. De 3 y de 4. Mumbrú debe ser un recurso, no la solución. Sigamos con los bases, debemos jugar con dos casi siempre, si contamos a Llull como tal, pero esos cuatro jugadores deben estar en la rotación con minutos suficientes como para sentirse importantes, si no, deja uno fuera del eurobasket mejor. El problema no son los minutos sino la falta de claridad. De estos 4 jugadores e incluiremos a Rudy, debe salir nuestra referencia ofensiva. Todo el equipo debe saber quien es y aceptarlo y ahí es donde tenemos uno de nuestros problemas (Spanoulis, Draper, Dragic, Kopponen, Parker, Bellinelli, etc), en todos los equipos se sabe quien es, pero nosotros no tenemos ni idea, y lo peor es que creo que el equipo tampoco lo sabe.
Me parece bien que se alternen en la titularidad, pero se necesita que el seleccionador marque esto ya, y cada uno puede tener su opinión sobre quien debe ser el que controle los minutos calientes o los minutos finales, pero no es bueno que cada día sea uno, no es bueno. Esto no es incompatible en absoluto con que cada día haya algún jugador que destaqué sobre los demás o que el mismísimo San Emeterio se casqué un 6 de 7 en triples, pero el que decide tiene que ser siempre el mismo.
Aquí es donde no nos encontramos, primero este equipo tiene material suficiente para ser un buen equipo, segundo, los jugadores deben dar más, no esperar a que se resuelva sólo, pues este campeonato hay que dar el 100 por 100. Si se da, este equipo tiene capacidad para aspirar al título, y hay que reconocer qu tendría mucho más mérito que los dos últimos. Tercero, Orenga debe espabilar, debe empezar a dejar de hacer pruebas y marcar las líneas de su equipo ya, y no es sólo Marc Gasol, hay más cosas. A partir de estas premisas, si hay que jugar con 8 ahora, es el momento
Démonos un voto de confianza y demoslo al equipo, primero por que no tenemos más remedio, y luego porque nos lo hemos ganado dominando el baloncesto con el permiso del imperio.
Ricardo Gorgues Lluch